%u2022 Anualmente, mueren entre 600 y 650 infantes por enfermedades cancerosas y más de la mitad es por leucemia.
El cáncer constituye la segunda causa de muerte en los niños mexicanos, entre uno y 14 años de edad, después de los accidentes, siendo la leucemia la más frecuente, al representar casi la mitad de los casos. En promedio mueren entre 600 y 650 infantes, al año, por enfermedades graves, de las cuales, entre 50 y 55 por ciento son cáncer en sangre.
De acuerdo a investigaciones realizadas por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), única institución que lleva un registro de tumoraciones cancerosas en niños, mediante el cual se han desarrollado diversos estudios en el ámbito clínico, epidemiológico y básico a nivel nacional, se establece que se han incrementado las enfermedades malignas y, anualmente, en el país se presentan de 4 mil a 4 mil 500 nuevos casos en pequeños, de los que el Instituto atiende cerca de 2 mil 300 pacientes.
El doctor Arturo Fajardo Gutiérrez, jefe de la Unidad de Investigación Médica Epidemiológica Clínica del Hospital de Pediatría del Centro Médico Nacional Siglo XXI, destacó que la leucemia, junto con los tumores del sistema nervioso central y los linfomas, ocupan entre el 60 y 70 por ciento de todos los cánceres que padecen los niños mexicanos.
En el caso de la leucemia, dijo, el Seguro Social ofrece atención integral a sus pacientes ya que, además de aplicar el tratamiento farmacológico, se mantiene y vigila el estado nutricional del niño, que es fundamental para recibir la quimioterapia, con el fin de mejorar el pronóstico.
Además, el Instituto cuenta con grupos de ayuda en los que participan padres e hijos, dirigidos por un grupo multidisciplinario, constituido por trabajadora social, enfermera, médico especialista y psicólogo, con lo que mejora la calidad de vida de los pacientes.
El doctor Juan Manuel Mejía Aranguré, adscrito a esta Unidad de Investigación, agregó que es entre el primer año de vida y los 4 años, cuando se presenta la leucemia y, al igual de otros cánceres, no se sabe a ciencia a cierta su origen.
Afirmó que en el cáncer en sangre, como en otras tumoraciones malignas, se desconoce su causa, aunque existen diversas hipótesis en cuanto a los factores de riesgo, siendo los del medio ambiente los más sobresalientes, como la exposición a campos electromagnéticos (vivir cerca de líneas eléctricas de alta tensión), los pesticidas y el tabaquismo de los padres.
El doctor Fajardo Gutiérrez indicó que el registro de cáncer que se estudia desde hace 12 años, ha permitido al IMSS realizar diferentes investigaciones, entre la que destaca la dedicada a %u201CLa Tasa de incidencia de Leucemia Aguda en niños de la Ciudad de México en 2006%u201D.
En ese estudio se reveló que el Distrito Federal tiene una de las tasas de mayor incidencia de leucemia reportadas en el mundo, al ubicarse de entre 55 a 59 casos por cada millón de niños menores 14 años, cuando el rango a nivel internacional es de 15 a 40, siendo la zona sur de esta Ciudad la más afectada por este mal.
Comentó que en general la mayoría de los tumores en infantes se diagnostican en etapas avanzadas, lo que en muchas ocasiones influye negativamente en el pronóstico debido a que el comportamiento del cáncer en niños es totalmente diferente al que afecta al adulto, ya que en los pequeños se desarrolla rápidamente.
El doctor Mejía Aranguré señaló que con el diagnóstico oportuno y la atención adecuada, estos pacientes tienen una sobrevida de hasta el 65 por ciento. El tratamiento con que cuenta el IMSS es a base de quimioterapia, que consiste en la administración de fármacos anticancerosos, por vía oral o intravenosa, que actúan destruyendo las células tumorales o impidiendo que se multipliquen.
El tratamiento tiene una duración de dos años, en promedio, dependiendo de cada paciente, aunque se continúa valorando al niño por cinco años, a fin de garantizar que no reaparezcan las células malignas, finalizó.
