Pulmon.mx.- En el marco del Día Internacional de la Mujer, Salud Justa MX realizó el conversatorio El engaño de la industria tabacalera desde la perspectiva de género, con el objetivo de exponer cómo este negocio engaña a las mujeres a través de un falso estereotipo de empoderamiento y libertad para atraer a más consumidoras.
En este evento se contó con la interesante participación de la Dra. Guadalupe Ponciano Rodríguez, Coordinadora del Programa de Prevención del Tabaquismo de la UNAM, quien aseguró que a lo largo de los años la industria tabacalera ha visto a las mujeres como un mercado importante al brindarles supuesto “estatus, aceptación y belleza”, aunque a finales del siglo XIX una mujer que fumaba era mal vista e incluso ameritaba cárcel.
Aseguró que una de las herramientas que más ha utilizado la industria tabacalera para atraer consumidores es la sensualidad femenina y la delgadez, ya que para mantener una figura esbelta “es mejor fumar un cigarro, que comerse un dulce”.
Siempre ha tomado imágenes de mujeres famosas que comenzaron a ocupar lugares importantes en un mundo dominado por hombres. La mujer fumadora atrae las miradas de los hombres y se vuelve una mujer “deseable”.
Ponciano Rodríguez, comentó que las mujeres siempre han sido un sector vulnerable, incluso en el tema de la salud, ya que son más susceptibles a desarrollar EPOC y otras enfermedades asociadas con el tabaquismo.
Existen formas de empoderamiento de las mujeres más allá de las presentadas por la industria tabacalera. Los instrumentos de mercadotecnia aprovechan la vulnerabilidad de las mujeres para presentarles un estereotipo femenino alejado de la realidad. Las mujeres reales pueden empoderarse más allá del tabaco o de un objeto.
En su turno, Aida Marín Acuapan, Activista Feminista por los Derechos de las Mujeres y Consultora en Políticas Públicas y Derechos Humanos, hizo hincapié en el tema del empoderamiento de mujeres reales e hizo énfasis en las visibles diferencias entre hombres y mujeres, ya que es importante reconocerlas.
Resaltó que hay múltiples mujeres, que viven diferentes realidades, esto es muy importante porque no necesariamente existe una forma de empoderamiento, el cual también puede ser colectivo, pero que busca alcanzar una vida autónoma, libre de elecciones e igualdad.
En el tema específico del tabaquismo, el empoderamiento cae en la ambivalencia, pues hace creer que fumar es sinónimo de lujo, glamour, clase, sensualidad, estilo, éxito e independencia, lo que genera que más mujeres fumen y generen daños graves a su salud.
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