El Secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, se reunió con el Consejo Nacional Agropecuario

La ingestión de carne de puerco o sus derivados no tiene nada que ver en la transmisión de la influenza A H1N1, por lo que es absolutamente seguro consumirla en sus diferentes presentaciones con las medidas higiénicas adecuadas, aseguró el Secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos.
 
Durante una reunión con el Consejo Nacional Agropecuario, el titular de Salud resaltó que no existe evidencia científica de que el consumo de carne de cerdo represente algún riesgo para transmisión del virus A H1N1 a los humanos.
 
Córdova Villalobos subrayó que las medidas de contención en el país y la participación de la ciudadanía, han permitido disminuir las infecciones de la influenza A H1N1, e incluso en 89% de los municipios del país no se registran casos, lo cual da la pauta para exhortar a los gobiernos estatales a reanudar las actividades cotidianas sin descuidar las acciones preventivas y de promoción de la salud, así como la vigilancia epidemiológica.
 
Detalló que las acciones serán selectivas y no globales, es decir, que si en una escuela aparecen uno o dos casos se podrá cerrar el salón o el plantel por una semana, pero no toda la zona, ya que además, añadió, para algunas madres de familia el desarrollo de sus actividades depende de la estancia escolar de su hijo.
 
El Secretario de Salud dijo que otra área productiva afectada es la turística por el temor de infectarse, sin embargo, ninguno de los sitios más visitados como Mazatlán, Puerto Vallarta, Huatulco o Cancún han registrado casos, %u201Centonces no hay razón de temor para visitarlos, se puede ir con toda seguridad, y más por el hecho de que quien llegara a infectarse, si acude desde el primer día de síntomas, tiene 100% de curación y muy bajo riesgo de transmitir la enfermedad%u201D.
 
Córdova Villalobos añadió que aun cuando sólo 4% de la población rural ha sido afectada por el virus AH1N1, operan las unidades móviles llamadas Caravanas de la Salud para llevar los servicios médicos a las zonas más apartadas del país.
 
Recordó que a la fecha se tienen dos mil 656 casos confirmados en México, de los cuales 64 son decesos, 54.7% son mujeres y es más frecuente en las personas de cero a 19 años. El 90% de de los pacientes iniciaron síntomas antes del 23 de abril.
 
De no haberse implantado las medidas como el aislamiento social, la cifra actual de dos mil 656 infecciones del virus A H1N1, se hubiera elevado hasta 60 mil o más casos, comentó.
 
Al respecto, el Presidente del Consejo Nacional Agropecuario (CNA), Juan Carlos Cortés García, reconoció el apoyo del gobierno federal hacia los sectores económicos afectados por esta contingencia, y respaldó las decisiones y medidas tomadas para preservar la salud de los mexicanos y recuperar los efectos negativos económicos que se enfrentan, para lo cual, junto con las secretarías de Ganadería y Economía, se implementan programas y medidas emergentes.
 
Al respecto, el Director General del Consejo Nacional Agropecuario, Miguel Ángel García Paredes, puntualizó que el CNA es el organismo cúpula del sector privado del campo en México y se constituyó en 1984. Agrupa a los organismos de productores y empresas de los sectores agrícola, pecuario y agroindustrial, así como los proveedores de insumos y servicios al campo, como mango, café, bovinos, cerdo y leche, entre otros.
 
En su oportunidad, el vicepresidente del Sector Pecuario, Vicente Gómez Cobo, explicó que el anuncio de que la influenza A H1N1 tenía en su genoma fragmentos de origen porcino impactó en gran medida en la venta de carne de cerdo y sus derivados, con una caída de la demanda.
 
Dio a conocer que en México hay 15 millones de cabezas de cerdo, anualmente se sacrifican 14 millones cada año, se producen 1.2 millones de toneladas de carne de este tipo, se registra un consumo total de 1.6 millones de toneladas y el valor de la producción es de 30 mil millones de pesos.
 
Además, genera 350 mil empleos directos y un millón y medio de indirectos. Los principales estados productores y, en consecuencia, los más afectados, son Jalisco, Sonora Guanajuato, Yucatán y Puebla, con dos terceras partes del total.