Noticias

Población callejera, invisible para las políticas en salud sexual y reproductiva

Llaman a INEGI y a CONAPO a reconocer a este sector de la población mexicana
 
La población callejera está %u201Cinvisible%u201D para las políticas públicas en materia de salud sexual y reproductiva, reconocieron este lunes especialistas, miembros de organizaciones civiles y funcionarios del gobierno federal en la Comisión de Derechos Humanos de DF.
 
En el foro Salud sexual y reproductiva en poblaciones callejeras: VIH, discriminación y maternidad, señalaron que este sector de la población mexicana carece de personalidad jurídica; vive apartado de las instituciones; no está reconocido ante el Consejo Nacional de Población (CONAPO) y el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), y experimenta violaciones a sus derechos humanos.
 
Según Alejandro Rodríguez, director de Prevención y Participación Social del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH/sida (Censida), hasta la fecha hay un registro %u201Cmuy pobre y poco confiable%u201D acerca de las personas seropositivas en situación de calle. Sí se les brinda atención pero no hay cifras concretas debido a que, cuando llega un caso a los servicios de salud, se necesita un domicilio por cuestiones epidemiológicas, de tal manera que se registra la dirección de un albergue o casas de familiares, ejemplificó.
 
Por su parte, Alejandro Becerra, director de Vinculación, Asuntos Internos y Programas Compensatorios del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), aseveró que la situación de las personas que viven en la calle pone de manifiesto la falta de conocimiento que tiene México sobre su población. %u201CUna de las preguntas básicas del censo es ubicar una casa habitación, y cuando no existe, no se puede generar la información correspondiente%u201D.
 
A su vez, Javier Martínez Badillo, en representación de la Red Mexicana de Personas Viviendo con VIH/sida, mencionó que la población callejera se enfrenta a la violación sexual, al comercio del cuerpo para obtener satisfactores y al consumo de drogas.
 
En este contexto, hay nula percepción del riesgo. %u201CEmpiezo a tener relaciones sexuales sin protección. Si en la calle difícilmente tenemos algo para comer, difícilmente vamos a tener acceso a condones femeninos y masculinos%u201D, expresó.
 
En tanto, Alejandro Estévez Compean, director de la Fundación Dar y Amor, afirmó que el 90 por ciento de las embarazadas en situación de calle no recibe atención médica. %u201CLos servicios de salud del gobierno no les dan el servicio por su condición. Cuando hay un accidente de una chica embarazada, les da terror a los paramédicos atenderla%u201D.
 
Se les niega el derecho a la salud, a pesar de que llevan un embarazo de alto riesgo por ser menores de edad, consumen frecuentemente estupefacientes y carecen de una higiene adecuada, añadió.
 
En entrevista para NotieSe, Juan Martín Pérez García, director de la organización civil El Caracol, dijo que es necesario que el INEGI y el CONAPO reconozcan la realidad de las personas en situación de calle, de tal manera que la incluyan en los censos y estudios sobre la población mexicana, pues derivará en políticas públicas acordes con la problemática.
 
Este sector socialmente marginado necesita el reconocimiento pleno de su ciudadanía; además de su incorporación en programas gubernamentales. %u201CNo hay que esperar a que la población callejera se acerque a los sistemas y diseños institucionales. Hay que modificar los esquemas. Ahora se trata de aproximarse a ellos%u201D, consideró.

Redacción

Equipo de redacción de la red de Mundodehoy.com, LaSalud.mx y Oncologia.mx

Related Articles

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Back to top button