Nutritiva.mx.- Es común que cuando se acerca el verano pensemos en ponernos a dieta, pero quizá puede ser un buen momento para cambiar nuestros hábitos. De acuerdo con la Consultora en Nutrición Alina García, “adquirir rutinas más sanas, además de ayudarnos a mantener nuestro peso, también influye positivamente en nuestra salud al evitar contraer enfermedades”.
Por ello, este verano, olvídate de las dietas y sigue estas recomendaciones para un estilo de vida más saludable:
•Mantén una dieta balanceada. Incluye en tus comidas frutas, verduras, cereales y proteínas. Estas últimas son indispensables porque, entre otras funciones, ayudan en la formación de las células y músculos, además fortalecen nuestras defensas. El atún, por ejemplo, es una gran fuente de proteína; de 100 gramos se pueden obtener hasta 24 de proteína. Además es un producto versátil y práctico, como las nuevas latitas de colores Atún Dolores que vienen en seis diferentes preparaciones, con cucharita integrada, para comer en cualquier momento.
•Bebe agua. Es importante tomar al menos ocho vasos de agua al día. Una buena hidratación es esencial para el cuerpo porque ayuda a los procesos fisiológicos de la digestión, así como al transporte de los nutrimentos y sustancias corporales, es decir, beber agua en cantidades suficientes, asegura una buena digestión.
•Actívate. De acuerdo con la Secretaría de Salud, lo más recomendable es realizar al menos 30 minutos de actividad física, cuatro o cinco veces a la semana. Al mantenernos activos mejoramos la oxigenación, la circulación y los músculos de nuestro cuerpo. La dependencia también aclara que no es lo mismo la actividad física que hacer ejercicio. Mientras que este último es un movimiento corporal programado, estructurado y repetitivo, la actividad física es cualquier desplazamiento corporal, desde sentarse, caminar, subir por las escaleras, etc.
•Duerme bien. Los expertos aseguran que lo más saludable es dormir, al menos, ocho horas diarias para evitar el riesgo de hipertensión o enfermedades cardiacas de otra índole. Pero además, de acuerdo con un estudio de la Universidad de Chicago, dormir un promedio de ocho horas continuas durante la noche, hace que el cuerpo pierda más cantidad de grasa corporal
