En el marco del V Congreso de Salud Sexual, celebrado del 3 al 5 de octubre en la ciudad de México, diversos expertos hicieron énfasis en la importancia de asumir la sexualidad como parte de la vida cotidiana.
Luis Perelmann explicó que es necesario integrar lo bueno de la sexualidad para crecer porque la sexualidad es parte de quien somos como individuos.
A su vez, el diputado David Sánchez Camacho propuso que debe existir un experto en la materia dentro de los órganos legislativos con el fin de sensibilizar y colaborar en la propuesta y aprobación de leyes que concierna a estos temas.
Las Metas del Milenio
En conferencia magistral, Eusebio Rubio, presidente de la Asociación Mundial para la Salud Sexual (WAS, por sus siglas en inglés), formuló la pregunta %u201C¿Por qué el lograr mejores niveles de salud sexual es una contribución a lograr mejores niveles de desarrollo humano?%u201D
Como respuesta, afirmó que la salud sexual, entendida como un estado general de bienestar físico, emocional, mental y social relacionado con la sexualidad, es una contribución para el desarrollo de una sociedad, motivo por el cual se realizó la Declaración de la Salud Sexual para el Milenio, que se enmarca dentro de las Metas del Milenio propuestas por la Organización de las Naciones Unidas.
Esta Declaración indica que la promoción de la salud sexual es fundamental para el logro del bienestar, así como para alcanzar el desarrollo sostenible y más específicamente para el logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Esto por el hecho de que las personas y comunidades que disfrutan del bienestar sexual están mejor preparadas para contribuir a la erradicación de la pobreza individual y social.
Entre los aspectos a tomar en cuenta dentro de esta declaración están: proteger los derechos sexuales para todos, avanzar hacia la igualdad de género, combatir las formas de violencia relacionadas con la sexualidad, acceso universal a la información sobre sexualidad y educación integral de la sexualidad, fomentar que los programas de salud reproductiva reconozcan el carácter central de la salud sexual, revertir la propagación de la infección del VIH e ITS, tratar las preocupaciones, disfunciones y trastornos sexuales y reconocer el placer sexual como componente de la salud y el bienestar total.
México
Rubio comentó que en México existe un avance significativo en la materia al reconocerse la existencia de los derechos sexuales, aunque aún se haga la separación de sexual y reproductivo y no se vea esto como un conjunto.
Por otro lado, explicó que el placer sigue fuera de las políticas públicas y no se promueve un aspecto básico de la sexualidad: el derecho al placer sexual.
Para finalizar, el especialista acotó que se requiere incrementar los tratamientos y las campañas sobre disfunciones sexuales debido al gran desconocimiento que existe en la materia y la serie de tabúes que se derivan de dichas disfunciones, sobre todo tras dar a conocer la cifra de que en México más de 26 millones de personas padecen alguna disfunción sexual.
