El 40 por ciento de mexicanos puede padecer varicocele
Provoca que la temperatura de los genitales se eleve, frenando la formación de espermatozoides.
El varicocele se define como la presencia de várices en los testículos, los síntomas pueden ser dolor a nivel escrotal o testicular. De acuerdo con especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), hasta el 40 por ciento de los hombres de entre 15 y 30 años de edad, podrían padecerlo.
Ángel Vélez Laguna, urólogo del Hospital General de Zona (HGZ) No. 2-A Troncoso, informó que esta enfermedad se presenta como consecuencia de insuficiencia en el drenaje de las venas, lo que ocasiona un estancamiento de la sangre, generando desde complicaciones leves hasta problemas asociados a la reproducción, como esterilidad o infertilidad.
El doctor Vélez Laguna comentó que esta afección puede ser hereditaria o adquirida; señaló que existen causas extrínsecas que ocasionan un varicocele, como tumores en la parte inferior del riñón; ya que comprimen la vena testicular, donde se drena la sangre, y ésta se estanca.
Durante 2007 el Seguro Social reportó 7 mil 727 consultas por esta causa, 4 mil 330 de ellas en hombres de 15 a 39 años de edad. Nuevo León registró 818 atenciones médicas, seguido por el Estado de México con 804 y el Distrito Federal, con 796.
En el Instituto el varicocele se trata quirúrgicamente, previo diagnóstico clínico, que consiste en la observación y palpación del área inguinal, incluyendo genitales. Todos los casos son diferentes, pero de fácil interpretación clínica para llegar a una valoración.
Otros estudios utilizados son la espermabioscopia, que arroja datos de la cantidad, calidad y movilidad de los espermatozoides, y el ultrasonido doppler, que determina la existencia de vasos varicosos.
El doctor Miguel Gómez Román del Hospital General de Zona No. 25, explicó que la cirugía consiste en ligar los vasos sanguíneos que están dilatados y deja que la sangre retenida se reabsorba y genere nuevas venas, que van a dar la función que tenían las obstruidas.
Gómez Román dijo que la reincidencia de esta enfermedad es menor al uno por ciento; de presentarse nuevamente el problema y si se desea seguir procreando, se tendría que recurrir a otra operación.
Para detectar este mal, los expertos del IMSS lo tipifican en tres grados: el primero no es notorio a la vista y sólo se encuentra con ultrasonido doppler; que detecta venas obstruidas por medio del sonido; el segundo es visible, aunque no representa una alerta y puede pasar desapercibido; y el tercero es completamente evidente, al estar las venas agrandadas y varicosas.
Entre las secuelas que puede acarrear el varicocele destacan: alteraciones en el desarrollo del testículo por mala irrigación de la sangre, es decir, hay pacientes que tienen diferencias en el tamaño testicular. Donde se presentó varicocele, el testículo es de menor tamaño, comparado con el otro.
Los especialistas recomiendan, que al igual que la mujer se revisa sus senos, el hombre palpe sus genitales externos por lo menos una vez al mes. Si encuentra alguna anormalidad o diferencia, lo más adecuado es acudir al médico.