%u2022 Se interesa sólo por una parte de los objetos, juguetes y/o personas (ej. Sólo por las ruedas de los cochecitos o por el pelo de las personas o por las aspas del ventilador).
%u2022 Presta atención a sonidos que él mismo produce.
%u2022 Generalmente parece no atender cuando se le habla (actúa como si fuera sordo).
%u2022 Se entretiene con palitos, hilos, piedritas, hojas, etc. en vez de con juguetes.
%u2022 Se balancea durante períodos largos de tiempo, moviendo el tronco de un lado para otro, o hacia adelante y atrás.
%u2022 Busca que las cosas que forman su entorno (casa, habitación, etc.) permanezcan sin cambio.
%u2022 Da vueltas sobre si mismo, corre de un lado a otro o sube y baja escaleras durante largos períodos de tiempo.
%u2022 Presenta berrinches inexplicables, sin causa aparente.
%u2022 Tiene la costumbre de mover, sacudir o aletear las manos.
%u2022 Evita la mirada cuando se le quiere mirar a los ojos.
%u2022 Le molestan algunos ruidos (llega a taparse los oídos).
%u2022 Se interesa por ruidos como el de la aspiradora, lavadora, etc.
%u2022 Da la impresión de que resiste el dolor más que otros niños.
%u2022 Se golpea la cabeza contra la pared, suelo, muebles o con la mano.
%u2022 Suele entretenerse repitiendo una misma actividad (ej. Alinea cosas, levanta torres y las tira, etc.).
%u2022 Reacciona con berrinches ante situaciones o personas nuevas, o cuando se interrumpen sus rutinas.
%u2022 Cuando el niño quiere algo que no puede obtener por sí mismo, le lleva a usted tomándolo de la mano hacia el objeto que desea (pero sin mirarle ni hablarle).
%u2022 Algunas cosas que aprende las repite solamente en ciertos lugares y/o con determinadas personas.
%u2022 Gira objetos, mostrando gran habilidad.
%u2022 Tiene preferencias extrañas de ciertos alimentos por su consistencia (suaves, ásperos, crujientes, etc.), o por su sabor (dulces, salados o ácidos, etc.).
%u2022 Constantemente huele lo que encuentra.
%u2022 Reacciona de forma extraña al contacto de ciertas texturas (suaves, ásperas, etc.).
%u2022 A veces sorprende con habilidades inesperadas.
%u2022 Su conducta resulta difícil de predecir o entender.
%u2022 Entiende lo que se le dice de una forma muy literal; no entiende las bromas, los juegos de palabras y no realiza procesos lógicos.
%u2022 Pronunció algunas palabras que de pronto dejó de decirlas sin motivo aparente
%u2022 Nunca ha hablado
%u2022 En ocasiones dice alguna palabra suelta
%u2022 Repite preguntas o frases que ha oído (personas, televisión, radio, etc.), inclusive con una voz similar a la que escuchó.
%u2022 Utiliza mal los pronombres personales (ej. Dice tu en vez de yo, quieres en vez de quiero).
%u2022 No reconoce las situaciones de peligro, pareciera que no le tiene miedo a nada.
%u2022 Para poder realizar sus actividades diarias (comer, dormir, etc.) debe llevar a cabo rutinas y rituales que no pueden ser alterados.
%u2022 En ocasiones ríe de forma incontrolada y sin causa aparente.
%u2022 A veces camina de puntas.
%u2022 Dice palabras que no tienen ningún significado.
