México DF,- El motor de la lucha contra el VIH/sida en México y el mundo fue la necesidad de ejercer el derecho a la vida y a la salud, %u201Co tenías medicamento o te morías%u201D, expresó el activista Luis Adrián Quiroz durante la emisión de NotieSe en Radio el jueves pasado.
El representante del Grupo de Derechohabientes Viviendo con VIH/sida del Instituto Mexicano del Seguro Social (Dvvimss) señaló que las organizaciones de la sociedad civil pioneras en el tema lograron, tras hacer una lucha aguerrida, colocar sus demandas en la agenda pública.
Quiroz, quien inició su carrera como activista en el Partido Comunista, precisó que fue en 1996, después de la Conferencia Mundial de Sida en Vancouver, cuando ocurrió un acto simbólico para la lucha civil contra la pandemia en México. En ese año un grupo de personas, encabezadas por el Frente Nacional de Personas Afectadas por el VIH (Frenpavih), salieron a las calles para exigir su derecho a la salud, pues se acababan de presentar los inhibidores de proteasa, que incrementaron las esperanzas de vida de los seropositivos.
Hoy día, indicó, existe el Consejo Nacional para la Prevención y Control del Sida (Conasida), en donde las autoridades y la sociedad civil organizada dictan las políticas públicas en materia de VIH, además de que los tratamientos antirretrovirales, con o sin seguridad social, ya son una obligación del Estado; así como la distribución gratuita de condones en los centros de salud públicos. Esto no es una dádiva del gobierno, sino producto de los impuestos que paga la ciudadanía, recalcó.
Por eso, quienes piden dinero en los camiones para el VIH/sida son una farsa, %u201Cson atracos simulados%u201D. Se trata de un grupo de jóvenes %u201Cvolanteros%u201D que se dedican a estafar a la gente, toda vez que compran montones de hojas impresas por el precio de 200 pesos en la Glorieta del Metro Insurgentes, y sólo para alimentar su bolsillo, denunció. Además, sus credenciales son falsas y poseen un discurso estigmatizado, ya que culpan a todo el mundo de su supuesta desgracia, incluso algunos de ellos se dejan enflacar para decir %u201Cyo vivo con sida%u201D, y así causar la lástima ajena, en lugar de aclarar que el VIH/sida es una enfermedad crónico-degenerativa como cualquier otra.
A pesar de los logros obtenidos en la actualidad, aún queda, entre otras cosas, la lucha contra la discriminación de las personas que viven con VIH/sida, sobre todo en ámbitos como la escuela, el sector salud y el trabajo, sitios en donde las violaciones a los derechos humanos de los seropositivos son prácticas comunes, dijo.
En este sentido, las asociaciones civiles tienen la tarea de vigilar las acciones %u201Cmañosas%u201D de las instituciones gubernamentales e instancias del sector privado. Al respecto, Quiroz lamentó el caso de una trasnacional que pertenece al Consejo Nacional de Empresas sobre Sida (Conaes) %u2013coalición de compañías que se comprometen a practicar políticas laborales en pro de la no discriminación-, la cual ofrece un %u201Cdoble discurso%u201D, pues negó un derecho a una mujer por su condición de VIH positiva. El activista no quiso dar más datos, ya que se estudia ejercer la acción jurídica correspondiente.
Adelantó que Dvvimss, que cuenta con un lustro de vida, está por iniciar una campaña preventiva %u201Cde joven a joven%u201D, en donde, entre otras cosas, un muchacho seropositivo compartirá con otros qué fue lo que sucedió para que no usara preservativo. Su importancia radicará en desmitificar el sexo protegido. %u201CParece ser que el amor nos inmuniza contra cualquier tipo de virus. Ahora la famosa prueba de amor radica en pedirle a la pareja hacerlo sin condón%u201D.
Finalmente, Luis Adrián Quiroz instó a denunciar las arbitrariedades e injusticias asociadas al VIH/sida; asimismo, proporcionó su correo electrónico: [email protected], y la página web de su organización: www.dvvimss.org.mx
