México D. F., 30 de abril (Redacción LaSalud.com.mx).- Investigadores del Instituto Howard Hughes, del Instituto Tecnológico de Massachussets, descubrieron que la combinación de estímulos cerebrales y fármacos podría funcionar para el tratamiento de la pérdida de memoria y el déficit de aprendizaje relacionados con enfermedades neurodegenerativas.
Experimentos con ratones que sufrían un padecimiento similar a la enfermedad de Alzheimer demostraron que la recuperación de la memoria de tareas enseñadas previamente es posible mediante ejercicios cerebrales y la administración de ciertos medicamentos.
Otra conclusión interesante de la investigación es que el término “pérdida de memoria” no es adecuado para describir el tipo de déficit mental asociado a las enfermedades cerebrales degenerativas. De acuerdo con los científicos, “la memoria no se pierde, sino que se vuelve inaccesible”.
Los animales fueron entrenados para encontrar el camino hacia su alimento dentro de un laberinto evitando una descarga eléctrica. Seis semanas después de que los ratones fueron manipulados para activar en ellos una proteína relacionada con las enfermedades neurodegenerativas, ya no pudieron recordar cómo encontrar la comida.
El equipo de investigación dividió a los ratones en dos grupos, uno de ellos fue colocado en un ambiente en el que se les estimuló con juguetes, ruedas para ejercicio y otros ratones. Estos roedores pudieron recordar mucho mejor la prueba de la descarga eléctrica que los del grupo que no fue estimulado; además fueron capaces de aprender cosas nuevas.
El siguiente paso del estudio consistió en probar en los ratones una clase de medicamentos llamados inhibidores de histona deacetilasas o HDAC. Estos fármacos lograron mejorar la memoria y el aprendizaje de forma similar a las mejoras logradas en el ambiente de estimulación mental.
El hecho de que los animales lograran recuperar la memoria a largo plazo fue calificado como “extraordinario”. “Esto sugiere que en trastornos como el Alzheimer la memoria no se borra, sino que se vuelve inaccesible debido a la enfermedad, y por lo tanto puede ser recuperada”, afirmaron los científicos.
Otros especialistas, como el doctor Luis Ignacio Brusco, director del Centro de Alzheimer de la Universidad de Buenos Aires, se mostraron más cautelosos ante el descubrimiento. El doctor Brusco aclaró que “no se puede reproducir la enfermedad de Alzheimer -tal como afecta a los humanos- en animales”.
Aunque consideró el estudio como prometedor e interesante, Brusco señaló que aún faltan muchas investigaciones para saber si estos resultados pueden aplicarse al ser humano. “Lo que se generó con el modelo de este estudio fue sólo parte de la patología de la enfermedad, fundamentalmente porque el Alzheimer afecta en áreas de asociación en el cerebro que no existen en el animal”, detalló.
Los responsables del estudio planean ahora estudiar los mecanismos por los cuales un ambiente estimulante conduce a la mejora del aprendizaje y la memoria. (BBC Mundo)