La sonrisa de Fundación Cima
Por Carmen Gómez
México, D. F., 10 de Noviembre (Mundo de Hoy).- Una mujer de dulces ojos grandes acaramelados, de aspecto sano y de honesta sonrisa nos recibió en Fundación Cima para proporcionarnos información sobre la misma, nunca me imaginé que Bertha Aguilar había cargado sobre su cuerpo la amarga experiencia de padecer cáncer de mama.
La Asociación Mexicana contra el Cáncer de Mama A.C., conocida como Fundación Cima es un organismo no gubernamental sin fines de lucro que nació hace cuatro años con el propósito de difundir información actualizada que permita dar una nueva esperanza de vida a las mujeres mexicanas que padecen cáncer de mama. Sus fundadoras, Alejandra de Cima y Bertha Aguilar son dos sobrevivientes de este padecimiento que han luchado incansablemente por ayudar a cientos de mujeres a enfrentar la enfermedad con fe, valor y confianza.
Bertha Aguilar habló para Mundo de Hoy sobre la satisfacción y los retos que ha tenido que enfrentar en la Fundación y en su propia vida.
“Nuestra función es dar información. Antes nadie te hablaba del tema, somos la única institución que está atacando el problema desde la raíz y la raíz de este problema es la falta de información, el mito, el tabú. La razón de ser de nuestra fundación son las campañas de detección oportuna, como Favor de Tocar, llamar a las cosas por su nombre, hablar de lo que pasa realmente cuando te enfermas a los 30 años cuando eres una chava, porque se creía que esta enfermedad era de gente grande, pero pues no.
El objetivo de Fundación Cima es que las nuevas generaciones no se mueran por cáncer de mama, que se lo detecten a tiempo”.
Como vicepresidenta de la Asociación, Bertha se ha encargado durante todo este tiempo, además de educar, informar y dar apoyo emocional, a buscar los medios por lo cuales se recauden fondos para que se puede brindar atención y tratamiento a las mujeres que padecen la enfermedad.
“La verdad es que esta labor no es nada sencilla, no siempre las empresas y los laboratorios nos quieren apoyar. Afortunadamente sí hay a quienes les interesa y se han comprometido como Avon, Dove y ahorita Sanofi-Aventis viene a verme porque desean hacer una alianza, el hecho de que estén interesados y nos busquen es buenísimo. Es que realmente es muy triste cuando viene una mujer de ‘cero’ recursos rogando por medicamento y no hay”.
Bertha compartió que algunas situaciones a las que se enfrenta diariamente la ponen en una encrucijada. “A la Fundación viene diario gente a pedir, a veces la gente quiere que tú les soluciones el problema, pero debe de haber una estructura. Decidir a quién le ofreces tratamiento y a quién no se lo das no es nuestra función, no lo podemos hacer pero el Instituto Nacional de Cancerología de la Ciudad de México (INCAN) sí porque hace un estudio socioeconómico y te dice con cuánto te ayuda, nosotros no podemos hacer eso”.
Como siempre sucede en México, mucha gente que tiene los recursos para financiarse el tratamiento no lo hace y de esta manera le resta oportunidades a los menos favorecidos quienes a parte de lidiar con la enfermedad se angustian por no tener ni siquiera para un medicamento y por el miedo de que el padecimiento les impida seguir trabajando.
“Llega gente con chofer a contar las peores tragedias, la verdad es que nadie quiere gastar en enfermedades. Nosotros anhelamos que se salven vidas, es por eso que el 15 por ciento de todo lo que recaudamos lo destinamos al INCAN”, señaló la vicepresidenta.
Cabe destacar que Fundación Cima hace alianzas estratégicas con empresas, instituciones o asociaciones interesadas en unir esfuerzos y realizar proyectos de manera conjunta en apoyo a la lucha contra el cáncer de mama, también realiza convenios con hospitales, centros médicos y de salud, farmacias y laboratorios para dar apoyo a las mujeres, principalmente de escasos recursos, en la realización de estudios médicos, tratamientos y compra de medicamentos oncológicos y cuenta con centros de información, educación y difusión.
“La razón por la que la gente no se hace los estudios es porque no hay precios accesibles ni estudios de calidad. La fundación tiene una serie de convenios, tenemos doctores que te cobran 200 pesos en el Hospital ABC, muchos doctores que se están uniendo y cobrando muy barato. Si tienes una mala experiencia ya tenemos con quien canalizar desde el ABC hasta los Laboratorios Médicos Polanco. Una mamografía en estos lugares puede costar desde 250 a 500 pesos, los cuales normalmente costarían aproximadamente 1,500. Es muy importante tener cuidado de quién está interpretando esas mamografías, que no sean ‘charlatanes’, sólo hay 40 radiólogos certificados en México”, advirtió Aguilar.
Bertha Aguilar dice seguirá insistiendo y trabajando para que se aprenda a hablar con la verdad acerca de la enfermedad. “Yo me lo descubrí de puro ‘churro’ saliendo de nadar, me toqué una bolita, mi ginecólogo jamás me palpó y estamos hablando de la comunidad médica privada, ahora imagínate en el gobierno. Somos como la fundación encargada de decirle a los doctores ‘aquí venimos y venimos fuertes’ y de decirle al Gobierno ‘aquí estamos y no nos vamos a callar”.
Fundación Cima también canaliza a las mujeres a las distintas instituciones médicas para la realización de estudios de mamografía y/o ultrasonidos requeridos, pero en sus instalaciones inyectan vida y esperanza.
“Somos un centro en donde damos luz y esperanza A mí cuando me dijeron ‘Bertha tienes cáncer’ y yo lloraba, los lugares que había eran oscuros, me decían ‘Ay pobre, y tan chica’ y yo dije ‘ni pobre, ni chica, yo salgo adelante porque salgo adelante’. No había un lugar en donde te dijeran las cosas como son. Creo que cuando una mujer toca las puertas de la fundación se va mucho más tranquila, hay grupos de apoyo dirigidos. Te damos muchas herramientas para reinventarte, que es lo que tienes que hacer, no eres la misma de antes. Al final de cuentas también es cuestión de actitud, también hemos conocido a quien no quiere salir adelante”, aseveró Bertha.
Hace algunos años Bertha no hubiera pensado que de algo tan malo haya surgido algo tan bueno, ni que tuviera tanta fuerza. Pero sabe perfectamente que la mujer con cáncer de mama necesita mucha ayuda porque es un proceso muy doloroso y devastador aún cuando cuentas con una pareja.
“Algunos hombres en México no dejan que sus esposas vayan al ginecólogo, esto es muy arcaico, posponen las citas para que ellos vayan, ahora imagínate este tipo de hombres con mujeres sin seno. Gracias al documental que tenemos en Cima vi una parte de Fernando, mi esposo, que yo no había visto, decía que el me buscaba mucho y yo lo rechazaba y dice una frase ‘es que no eras la única que sufría’. Fernando es una persona que le ha sabido llegar muy bien a los hombres que han querido escucharlo. Aquí a la que le queremos llegar es a la mujer, es a ella a la que tenemos sanar porque a mí mi esposo me buscaba y me quería, pero yo no me quería, yo lo pude haber perdido, gracias a Dios no pasó, por el poco amor que yo me tenía. Me sentía horrorosa y creía que él me veía así, y no me sentía merecedora de ese cariño. Hay hombres buenos que están ahí para las mujeres. Lo que se debe entender y creer es que tú vales más que un seno.
Hoy Bertha Aguilar, aunque con cierto temor a la reincidencia, es una mujer que disfruta la vida al máximo, se quiere, se respeta y se valora y lo mejor de su experiencia se lo ha dado a sus hijos quienes todavía muy pequeños han aprendido a compartir con otros los beneficios que les da la vida haciendo labor social como su mamá.
Por el momento Fundación Cima está haciendo brigadas de salud con el DIF del Estado de México, llevando una unidad móvil y haciendo mamografías, pocas, pero con seguimiento porque, como ella misma dice, no se trata de hacer el ‘mamotón’.
“Ahorita estamos con altruismo médico que son los que llevan las unidades móviles y es un proyecto tripartito, el DIF, altruismo médico y Fundación Cima (con dinero que junté de otras empresas). Estamos atacando el problema desde la raíz y por eso llegamos hasta la sierra, estamos con comunidades mazahuas a las que le estamos llevando información a través de canciones de la banda El Recodo, especialmente con una canción que se llama ‘Cuida tu cuerpo’. Es la canción de ‘las vías del amor’,le cambiaron la letra a ‘cuida tu cuerpo y autoexplórate porque el cáncer es curable’, está increíble”, comentó con entusiasmo la vicepresidenta de Cima.
La campaña Favor de Tocar se encuentra en su segunda temporada y esta vez las elegidas para motivar a las mujeres a autoexplorarse serán Galilea Montijo, Bárbara Mori, Aylín Mujica, Jacqueline Bracamontes, Martha Cristiana, Ilse y Mimí y se dice que terminará de una manera muy especial, con parejas muy famosas y hombres que les dirán a las mujeres ‘porque todos venimos de una mujer, te regalo una mamografía o te enseño a explorarte’.
Cien por ciento convencida de que sólo haciendo algo por los demás se puede salir adelante como país, Bertha decidió desde hace mucho elegir la parte más brillante de la vida sin cerrar los ojos ni olvidar que sí hay una parte gris porque en ella la labor existe y siempre va a existir. Es una mujer que sabe reír aún en los momentos difíciles y que cree que realmente se puede ser feliz.
“Me veo al espejo y le pido a Dios fuerza porque me cuesta pensar en la reincidencia, pero creo que hay que tener dignidad. Hay mucho más cosas que ser una mujer bonita, hay cosas que te cuestan trabajo, pero hoy entiendo que el cuerpo se acaba, se deteriora y más te vale que valgas por otras cosas. Hay que tener gracia y dignidad. No dejarte vencer por las miradas de los demás, hay que arreglarse y salir, aprender a vivir y no ser una víctima. La mujer que sobrevive al cáncer de mama se tienen que reinventar, hacer algo diferente, no permitir que esta mente que trabaja tan rápido se la pase diciendo que te puedes morir, que vas a recaer y pedir que se nos regrese siempre a lo que de verdad vale”.
Esta mujer de hierro concluyó mostrando otra de sus grandes virtudes, el agradecimiento por el apoyo que ha recibido la Fundación Cima de los medios, de las empresas privadas y del gobierno.