La osteogéneis imperfecta
LaSalud.mx.- Las formas más severas de diagnosticar osteogéneis, son a través de ultrasonidos prenatales en el segundo o tercer trimestre de embarazo; es una enfermedad de los huesos de cristal un padecimiento autosómico dominante lo que quiere decir que lo padecerá quien tenga una copia de este gen.
La osteogéneis imperfecta es un trastorno genético y hereditario que se caracteriza porque los huesos de las personas que lo padecen se rompen con facilidad, luego de sufrir un traumatismo mínimo e incluso sin causa aparente.
El doctor Guillermo Espinosa Fuentes, Coordinador de Enseñanza en la Salud de la Unidad 222 del Instituto Mexicano del Seguro Social, Delegación Estado de México señala que en los casos más severos se presenta fracturas desde el nacimiento, las más frecuentes en los huesos largos y vértebras.
Las personas que padecen de osteogénesis imperfecta tienen huesos quebradizos, puede variar de leve a grave y los síntomas son diferentes en cada persona. Algunos de los síntomas que podrían manifestar las personas que padecen osteogénesis imperfecta incluyen malformaciones en los huesos, baja estatura, cuerpo pequeño, músculos débiles, cara triangular, escleróticas (parte blanca del ojo color azul, morado o gris), columna vertebral curva y dientes quebradizos.
Sin embargo no existe una prueba en específico que ayude a determinar la osteogénesis imperfecta, los médicos se basan en antecedentes familiares y médicos del paciente, además de un examen físico y radiografías, apuntó el Coordinador de Enseñanza en la Salud.
El tratamiento de este padecimiento depende de la gravedad del daño de los huesos y va desde tratamiento de fracturas, dientes quebradizos, medicamento para el dolor, fisioterapia, uso de silla de ruedas, corsés ortopédicos hasta una cirugía.
Espinosa Fuentes resaltó que es una enfermedad de la cual se sigue investigando acerca del gen que la provoca así como del descubrimiento de algún medicamento que pueda contrarrestar esta enfermedad.
Concluyó que es importante llevar un estilo de vida saludable que incluya hacer ejercicio, mantener el peso, no fumar, no tomar muchas bebidas alcohólicas o con cafeína, ayudando a prevenir el rompimiento de los huesos.