Buenas tardes a todas y a todos,
maestro Felipe Calderón Hinojosa, Presidente de México;
licenciada Margarita Zavala, presidenta del DIF Nacional;
compañeros secretarios,
señor Antonio Luigi Mazzitelli, representante regional para México, Centroamérica y El Caribe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito;
señor Comisionado Nacional contra las Adicciones,
señoras y señores representantes de organismos internacionales, autoridades federales y estatales que nos acompañan,
Amigos todos:
Todos los mexicanos deben tener el derecho a una vida libre de adicciones que les permita contar con las mismas oportunidades para desarrollarse a plenitud, es el reto que el Presidente Felipe Calderón asumió desde el inicio de su administración y por el cual ha convocado a una alianza entre sociedad y gobierno, a fin de informar sobre las consecuencias de las drogas y evitar que los niños y jóvenes caigan en las acciones del crimen o se les induzca a las adicciones.
Por ello, gracias a la voluntad política y económica del Ejecutivo federal y el Congreso de la Unión, se ha logrado tomar decisiones importantes: contamos con un marco normativo actualizado que nos faculta para enfrentar de mejor manera los problemas de las adicciones, y donde las entidades federativas participan activamente en un esquema de corresponsabilidad con importantes aportaciones federales.
A poco más de cuatro y medio años en la gestión del Presidente Calderón, se reconoce a nivel nacional e internacional que ha habido avances significativos, los cuales constituyen ya un legado para las generaciones futuras.
Hemos modernizado las estructuras nacionales para consolidar los esfuerzos de prevención, atención y control de las adicciones, fortaleciendo la rectoría del Estado mexicano.
Ahora contamos con la Comisión Nacional contra las Adicciones y el Centro Nacional para la Prevención y Control de las Adicciones, lo que nos permite también atender el rezago en los servicios de tratamiento y llevar la prevención a todos los rincones del país, con la puesta en marcha de una red articulada de centros de atención y prevención en adicciones que permite garantizar la prestación de servicios con calidad en todo México.
Asimismo, con el trabajo intersectorial con las secretarías de Educación Pública, Trabajo, Desarrollo Social, el Instituto Mexicano del Seguro Social, el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado, y el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia, entre otros, y los consejos estatales contra las Adicciones, en el marco de la Campaña Nacional de Información para una Nueva Vida, se ha impactado a 17 millones de personas sobre los efectos negativos del consumo de las drogas, a fin de que tomen mejor sus decisiones, pues de ellas dependen su salud, su libertad y su vida.
En este extraordinario esfuerzo de coordinación, quiero reconocer el liderazgo de la licenciad Margarita Zavala, quien con su esfuerzo y compromiso ha logrado convocar a más de mil 800 personas, entre expertos y representantes de las organizaciones e instituciones líderes en este campo, así como a la población interesada y preocupada por este problema de salud, a deliberar, como lo mencionaba en forma propositiva, en tres foros regionales y un foro académico que han permitido establecer las líneas estratégicas, que llevarán a la actualización 2011-2012 este programa que hoy haremos entrega al señor Presidente.
Los programas contra el tabaquismo, contra el alcoholismo y el abuso de bebidas alcohólicas, contra la fármacodependencia y el de la acción específico: prevención y tratamiento de las adicciones, cuentan con un enfoque integral y multisectorial sustentado en la responsabilidad compartida de sociedad y gobierno con 79 compromisos puntuales de 76 instituciones y organismos de todo el país, que se habrán de impulsar en lo que resta de la presente administración para hacer frente a este problema y tener buenos resultados.
Este día en que conmemoramos el Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas compartimos la preocupación por este problema de salud mundial, pero también la constancia de la sociedad mexicana y de sus instituciones para hacer un frente común para reducir el problema de las drogas y sus consecuencias.
Compartimos también la inquebrantable voluntad de un gobierno convencido en la necesidad de garantizar a las generaciones futuras un México sin drogas, a fin de avanzar en la construcción del México que todos queremos, más justo, equitativo y sano, en donde todos verdaderamente podamos vivir mejor.
Muchas gracias.