Sin necesidad de hospitalización, con la más moderna tecnología y un eficiente cuerpo de especialistas médicos y de enfermería, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ofrece a sus derechohabientes una atención rápida y oportuna, con calidad, a través de miles de cirugías ambulatorias.
Durante 2009, en el Seguro Social se realizaron 445 mil 107 intervenciones de este tipo en Hospitales de Segundo Nivel, lo que representa el 39 por ciento del total de cirugías practicadas en el instituto. El promedio mensual es de 37 mil y al día se practican alrededor de mil 200.
La cirugía ambulatoria, explicó el doctor Miguel Ángel Mena Pantoja, médico adscrito al servicio de cirugía general del Hospital General de Zona (HGZ) número 24, es un procedimiento quirúrgico que se realiza bajo anestesia local, regional o incluso general, en pacientes que son ingresados y dados de alta el mismo día de la intervención.
La cirugía ambulatoria tiene muchas ventajas para el paciente, como la comodidad de recuperarse en su propio hogar, lo que se traduce en una mínima modificación del modo de vida del derechohabiente y su familia.
Otras ventajas son: atención personalizada y de calidad, y reducción notable en el tiempo de listas de espera. Disminuye el tiempo de inactividad postoperatoria y, por tanto, la incapacidad laboral, por lo que el paciente retorna más rápido a sus actividades cotidianas, además de representar una considerable reducción de costos.
Las cirugías de tipo ambulatorio, continuó el cirujano del IMSS, pueden agruparse conforme a la especialidad en la que se realizan. En cirugía general, las más comunes son la resección de lipomas o tumores de piel, además de la reparación de hernias, sean inguinales, umbilicales o de pared abdominal.
En materia de ginecoobstetricia, los procedimientos más recurrentes son la salpingoclasia (método anticonceptivo), las biopsias de glándula mamaria y cirugía colposcópica, procedimiento que consiste en la observación microscópica del cuello uterino y paredes vaginales que permite identificar lesiones precancerosas con gran precisión.
También se realizan en las especialidades de otorrinolaringología: septoplastía (corrección de defectos en tabique nasal) y amigdalectomía; urología, donde destacan la vasectomía y otros padecimientos del sistema genitourinario; oftalmología e incluso en algunos procedimientos de ortopedia.
Según estimaciones internacionales, la reducción de gastos gracias a la cirugía ambulatoria oscila entre 40 y 80 por ciento del que se generaría por una cirugía con hospitalización.
Entre las grandes ventajas de la cirugía ambulatoria se cuenta que puede aplicarse desde los seis meses de vida hasta en adultos mayores, ya que no existe un límite de edad.
El doctor Miguel Ángel Mena Pantoja recalcó que las intervenciones quirúrgicas ambulatorias conforman un esfuerzo que realiza el Instituto Mexicano del Seguro Social para darle un mejor servicio a sus derechohabientes ya que, recordó, disminuyen molestias, tiempos, trámites y gastos sin afectar la calidad de la atención.
