El diagnóstico oportuno y la preparación de los hospitales para atender la emergencia son factores claves que reducen la mortalidad por el contagio del virus A/H1N1, sostiene una investigación realizada por autoridades y especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
El artículo señala que el punto crítico se registró en abril de 2009, principalmente en la ciudad de México. Y en un segundo periodo, en el sureste del país, durante junio y julio.
En la investigación, publicada en ocho páginas, se establece que del 28 de abril al 31 de julio %u2013en el momento más álgido de la enfermedad- se reportaron en México 63 mil 479 casos de personas con síntomas similares a los de la influenza A/H1N1, pero de éstos, sólo 6 mil 495 (11 por ciento) fueron confirmados.
Del total de los casos confirmados, 6 mil 407 (92 por ciento) fueron pacientes ambulatorios (recibieron tratamiento médico y se les dio de alta) y 475 (7 por ciento) requirieron ser hospitalizados para sobrevivir al contagio; no obstante, otros 63 murieron (menos del uno por ciento), sostienen los autores de esta investigación, encabezada por el Director de Prestaciones Médicas del IMSS, Santiago Echevarría Zuno.
La posibilidad de contraer el contagio disminuyó en personas vacunadas contra la influenza estacional, no así en los casos de admisiones tardías, como los contagiados con padecimientos crónicos, que se asocian con riesgo mayor de muerte.
Los autores de este estudio son los especialistas e investigadores del IMSS: Santiago Echevarría-Zuno, Juan Manuel Mejía-Aranguré, Álvaro J. Mar-Obeso, Concepción Grajales-Muñiz, Eduardo Robles-Pérez, Margot González-León, Manuel Carlos Ortega-Álvarez, César González-Bonilla, Ramón Alberto Rascón-Pacheco y Víctor Hugo Borja-Aburto.
