México D. F., 7 de abril (Redacción LaSalud.com.mx).- Como cada 7 de abril desde 1950, hoy se celebra el Día Mundial de la Salud, el cual conmemora también la fundación de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Todos los años se elige un tema de salud específico con el objetivo de destacar un área prioritaria de interés para la salud pública a nivel mundial.
Este año, el tema central será la seguridad sanitaria internacional. Se espera que los altos líderes políticos se interesen en el tema y lo aborden, pues la salud está cada vez más estrechamente relacionada con los programas de seguridad nacional e internacional, enfermedades como la gripe aviar y el VIH/SIDA, además de las emergencias humanitarias, son un ejemplo de ello.
“Las amenazas para la salud no tienen fronteras. En una época caracterizada por el comercio y los viajes mundiales generalizados, las enfermedades nuevas y existentes atraviesan las fronteras nacionales y amenazan nuestra seguridad colectiva”, señaló la doctora Margaret Chan, directora de la OMS, en un mensaje alusivo a la celebración de este día.
La importancia de evitar la propagación de las enfermedades radica en el hecho de que si éstas desatan una epidemia, las consecuencias a nivel sanitario, humano y económico, pueden ser graves. “El VIH/SIDA es un claro ejemplo de la interdependencia existente entre la salud y la seguridad. El VIH/SIDA amenaza la estabilidad de regiones y naciones enteras. A diferencia de otras muchas enfermedades, el SIDA destruye a los miembros más productivos de la sociedad”, explicó la doctora Chan.
Cooperación e inversión, claves de la defensa
La edición 2007 del Día Mundial de la Salud debe servir para que gobiernos, organizaciones civiles, los sectores empresariales y la sociedad en general, comprendan que la cooperación es un factor fundamental para hacer frente a las amenazas que enfrenta el mundo en la actualidad.
Las enfermedades, la degradación del medio ambiente, las emergencias humanitarias, el bioterrorismo y los efectos del cambio climático, están poniendo a prueba la capacidad de la humanidad para trabajar en equipo.
Una de las metas principales de la OMS es generar un constante intercambio de información entre los países y fortalecer los sistemas de vigilancia internacional de la salud pública, lo que derivará en una mayor capacidad de respuesta ante posibles contingencias. El lema del Día Mundial de la Salud 2007 plasma el compromiso que cada nación debe asumir para con la seguridad sanitaria del mundo: “Invertir en salud para forjar un futuro más seguro”.
Aunque la colaboración es esencial en muchos niveles, indicó la doctora Chan, “cada país y cada comunidad deben invertir en salud y crear capacidad para prevenir las amenazas nuevas y existentes mediante el fortalecimiento de sus propios sistemas de salud pública. Con frecuencia esto requiere importantes inversiones en vigilancia de la morbilidad y en prevención y educación. Pero otras veces se trata de algo tan sencillo y asequible como proporcionar mosquiteros para reducir la propagación del paludismo, o garantizar la disponibilidad de agua potable en las emergencias humanitarias”.
El Reglamento Sanitario Internacional
Cabe recordar que en junio del presente año entrará en vigor el Reglamento Sanitario Internacional (RSI), el cual procurará “prevenir la propagación internacional de enfermedades, proteger contra esa propagación, controlarla y darle una respuesta de salud pública proporcionada y restringida a los riesgos para la salud pública, evitando al mismo tiempo las interferencias innecesarias con el tráfico y el comercio internacionales”.
Los países obligados por el RSI deben desarrollar, fortalecer y mantener su
capacidad para detectar y comunicar acontecimientos relacionados con la salud pública y responder a ellos. Estas naciones se comprometen también a llevar a cabo inspecciones sistemáticas y actividades de control sanitario en aeropuertos internacionales, puertos y algunos puntos fronterizos de cruce terrestre
