Estudiantes del Instituto Politécnico Nacional desarrollaron una bebida de naranja adicionada con un extracto vegetal denominado silimarina, que posee propiedades antihepatóxicas, antiinflamatorias, antioxidantes, antitumorales y hepatoprotectoras, mismas que inciden en la regeneración celular del hígado, por lo que es útil para tratar afecciones como la hepatitis, cirrosis y cuando existen daños hepáticos ocasionados por efectos colaterales.
Macedonio Martínez Ortiz, Mario Meza Segura, Mariana Riva Villo, Claudia Ivette Tapia Rivera, Cynthia Sharon Jiménez Gómez y Laura Bernal Carbajal, alumnos de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB), son los autores de este producto elaborado a base de jugo de naranja y un extracto denominado silimarina, el cual se obtiene de la planta conocida popularmente como %u201Ccardo mariano%u201D.
Martínez Ortiz resaltó que el interés por desarrollar la bebida radica en que es necesario contribuir al cuidado de la salud de personas con afecciones hepáticas, toda vez que en México existe un alto índice de padecimientos de ese tipo, ya que de acuerdo con cifras oficiales, anualmente se registran alrededor de 30 mil muertes por daños hepático, de las cuales 18 mil corresponden a personas enfermas de alcoholismo.
El estudiante de ingeniería bioquímica sostuvo que el sabor de la silimarina es desagradable al paladar. Detalló que después de realizar diversas pruebas decidieron combinarla con jugo de naranja, porque este fruto tiene características que ayudan a disimulan el sabor del compuesto y lo hacen agradable, de acuerdo con las pruebas sensoriales efectuadas.
Indicó que para elaborar la bebida se requiere seguir un proceso cuidadoso con el objetivo de conservar las propiedades del compuesto. %u201CEl cardo mariano es una planta con muchas espinas, por ello el primer paso es retirarlas del vegetal; posteriormente se separan los pétalos de la flor y las semillas, mismas que se maceran en alcohol durante una semana para obtener la silimarina%u201D, explicó.
El joven politécnico mencionó que una vez macerada la planta se evapora el alcohol y lo que queda es un compuesto graso que es insoluble en el jugo de naranja. %u201CPara hacer soluble el compuesto se adiciona un emulsificante y se añaden goma arábiga y óxido de titanio, con el propósito de obtener una emulsión estable y soluble en el jugo%u201D, expuso.
Comentó que la bebida se elaboró con apego a las normas de calidad establecidas oficialmente y no contiene conservadores. %u201CDebe mantenerse en refrigeración para que se conserve en buen estado hasta por dos semanas%u201D, precisó.
Al hablar de los efectos terapéuticos, el estudiante de la ENCB afirmó que para elaborar la bebida se basaron en un estudio reportado por la literatura científica, mediante el cual se evalúo el efecto en dos grupos de pacientes. %u201CUn grupo consumió una bebida placebo (sin silimarina) y otro consumió el compuesto; luego de concluir el tratamiento, los científicos comprobaron mediante estudios específicos que el daño hepático disminuyó en los pacientes que consumieron el compuesto%u201D, aseguró.
Finalmente, Macedonio Martínez subrayó que la bebida diseñada con la asesoría del científico de la ENCB, José Ortiz Gama, %u201Cno es una cura milagrosa y quizá no tiene un efecto terapéutico en personas con daños severos, pero sí es un auxiliar para tratar afecciones iniciales y moderadas de tipo hepático%u201D.
