Fueron entregadas por la Fundación Mexicana de Aviación y UCP Weels for Humanity. El donativo tiene un valor superior a un millón 500 mil pesos.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recibió 300 sillas de ruedas especiales con un valor superior a un millón 500 mil pesos que reforzarán la rehabilitación de menores de edad que padecen parálisis cerebral. El donativo fue hecho por la Fundación Mexicana de Aviación en conjunto con la organización UCP Wheels for Humanity.
En este sentido, el director general del IMSS, maestro Juan Francisco Molinar Horcasitas, agradeció la muestra de apoyo que incrementará la autosuficiencia y movilidad de niños y niñas que viven con esta discapacidad. Aseguró que la recepción de estas sillas permitirá al Instituto ofrecer tratamientos con los instrumentos necesarios para su cuidado y rehabilitación.
El doctor Felipe Cruz Vega, titular de la División de Apoyo a Contingencias y Desastres de la Dirección de Prestaciones Médicas del Instituto, dijo que el Seguro Social las distribuirá a todas sus delegaciones en el país.
Por su parte David Richard presidente de la Fundación UCP Wheels for Humanity, comentó que durante años habían enfocado sus actividades con organizaciones civiles, y destacó la importancia de esta primera experiencia con el Instituto Mexicano del Seguro Social.
En México, la parálisis cerebral ocupa el primer lugar de los problemas de discapacidad en la infancia y se estima que en cuatro de cada mil nacimientos se presenta este padecimiento.
Las sillas están diseñadas especialmente para las necesidades de los niños con este problema de salud, que no tienen la capacidad para mantener una postura correcta de manera independiente.
Entre las especificaciones técnicas de estos complementos de rehabilitación destacan que están diseñados con un sistema de posicionamiento en todo el cuerpo, ajustable y con apoyos laterales desmontables, correa de piel para sostener los tobillos y pies y soporte para la cabeza.
El uso de sillas de ruedas convencionales en el tratamiento de esta patología resulta contraproducente, ya que proveen poco soporte a la columna vertebral; los huesos de la columna se tornan débiles, y puede desarrollarse escoliosis y restricción de la función respiratoria.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recibió 300 sillas de ruedas especiales con un valor superior a un millón 500 mil pesos que reforzarán la rehabilitación de menores de edad que padecen parálisis cerebral. El donativo fue hecho por la Fundación Mexicana de Aviación en conjunto con la organización UCP Wheels for Humanity.
En este sentido, el director general del IMSS, maestro Juan Francisco Molinar Horcasitas, agradeció la muestra de apoyo que incrementará la autosuficiencia y movilidad de niños y niñas que viven con esta discapacidad. Aseguró que la recepción de estas sillas permitirá al Instituto ofrecer tratamientos con los instrumentos necesarios para su cuidado y rehabilitación.
El doctor Felipe Cruz Vega, titular de la División de Apoyo a Contingencias y Desastres de la Dirección de Prestaciones Médicas del Instituto, dijo que el Seguro Social las distribuirá a todas sus delegaciones en el país.
Por su parte David Richard presidente de la Fundación UCP Wheels for Humanity, comentó que durante años habían enfocado sus actividades con organizaciones civiles, y destacó la importancia de esta primera experiencia con el Instituto Mexicano del Seguro Social.
En México, la parálisis cerebral ocupa el primer lugar de los problemas de discapacidad en la infancia y se estima que en cuatro de cada mil nacimientos se presenta este padecimiento.
Las sillas están diseñadas especialmente para las necesidades de los niños con este problema de salud, que no tienen la capacidad para mantener una postura correcta de manera independiente.
Entre las especificaciones técnicas de estos complementos de rehabilitación destacan que están diseñados con un sistema de posicionamiento en todo el cuerpo, ajustable y con apoyos laterales desmontables, correa de piel para sostener los tobillos y pies y soporte para la cabeza.
El uso de sillas de ruedas convencionales en el tratamiento de esta patología resulta contraproducente, ya que proveen poco soporte a la columna vertebral; los huesos de la columna se tornan débiles, y puede desarrollarse escoliosis y restricción de la función respiratoria.
