Por Cindi Islas Miranda
México, D.F., 12 de abril (Mundo de Hoy).- La osteoporosis es una enfermedad que afecta a los dos sexos pero las mujeres tienen siete veces más riesgo de padecerla porque existe una relación estrecha entre las hormonas femeninas (estrógenos) y el mal.
Dicha padecimiento se debe a una reducción de la masa ósea: es la pérdida de la estructura del hueso, lo que determina que éste se vuelva más y más frágil, facilitando la aparición de fracturas a consecuencia de caídas, golpes o incluso de manera espontánea.
Por lo que resulta importante mantener a la población informada sobre el tratamiento que deben llevar las personas que la padecen para evitar su progreso. Los factores de riesgo para detonar la enfermedad son tener una dieta pobre en calcio, consumo alto de proteínas, fumar o beber, falta de ejercicio y por herencia.
La forma común para detectarla es sufrir de dolor en la cintura, presentar una pequeña deformidad en la espalda en forma de joroba, padecer de fracturas con facilidad en las vértebras, muñecas y cadera.
Cuando se entra a la menopausia es más fácil que la osteoporosis aparezca, ya que se dejan de producir hormonas indispensables para el buen funcionamiento del organismo, por lo tanto es bueno consultar al médico para que recete una dieta adecuada para la persona, donde se incluyan las vitaminas, lácteos, minerales y proteínas requeridas.
Un dato interesante, es que no existen estudios específicos para diagnosticar osteoporosis, los más cercanos son las radiografías, realizadas en las partes del cuerpo donde se sufrió la fractura. Así se detecta cuán gastado o deteriorado se encuentra el hueso.
Otro estudio llamado densitometría ósea permite observar cuánto hueso hay en riesgo de fracturarse, para ello se investiga el estado de la columna vertebral (lumbar) y las caderas de la persona.
Para evitar la enfermedad se recomienda consumir productos lácteos (calcio) desde la infancia, la ingestión de vitamina D, pero si ya se llegó a la edad adulta, además de comer lo antes mencionado se recomienda administrar hormonas (estrógenos), que la mujer ya no produce al entrar a la etapa de la menopausia.
Los estrógenos se administran en forma de pastillas, gales o parches sobre la piel, todo esto debe ser medicado por un ginecólogo a partir del diagnóstico de la menopausia.
Recordemos que la osteoporosis es una enfermedad que se puede prevenir, pero que si ya se tiene debemos consultar a nuestro doctor para llevar un tratamiento adecuado y así evitar que se desarrolle y deteriore más nuestro sistema óseo.
