Servicios y costos de la salud mundial
LaSalud.mx.- En los últimos días se revelaron algunos documentos acerca de las negociaciones secretas, en beneficio de un servicio de salud con oportunidades y beneficios comerciales en las que se promueve el turismo de salud, la privatización y el costo elevado de la salud.
Existe una propuesta comercial que está destinada a mercantilizar los servicios de atención médica a nivel mundial, lo cual conlleva mayores costes para los gobiernos y peores prestaciones para los pacientes en beneficio de las grandes empresas del cuidado de la salud y de las compañías de seguros en un negocio 6 billones de USD.
Un documento de discusión ha expuesto a los negociadores del secreto Acuerdo sobre el Comercio de Servicios (TISA) que están discutiendo amplias reformas de los sistemas nacionales de salud pública, las cuales promoverán la deslocalización de los servicios de atención de la salud y la privatización.
La propuesta, supuestamente presentada por el gobierno de Turquía, fue discutida por los estados miembros de la UE el pasado mes de septiembre en las negociaciones sobre el TISA que tuvieron lugar en Ginebra. Sugiere un anexo relativo a los servicios de atención médica en el TISA que facilitaría el acceso de los pacientes a servicios de salud en el extranjero.
La propuesta titulada “Documento de reflexión sobre los servicios de atención a la salud en el marco de las negociaciones del TISA” declara que “existe un enorme potencial sin explotar para la globalización de los servicios de asistencia médica”, principalmente porque “los servicios de atención a la salud (sic) son financiados y proporcionados por el estado o por organizaciones de bienestar social y no tienen prácticamente ningún interés para los competidores extranjeros debido a la ausencia de un objetivo de orientación hacia el mercado para la actividad”.
El documento sigue explicando que el comercio de los servicios de la salud puede crear oportunidades y tener una serie de beneficios para los socios comerciales que participan en las actividades comerciales.
“La propuesta elevaría los costes de la asistencia médica en los países en desarrollo y disminuiría la calidad en los países desarrollados de Europa, América del Norte, Australia y otros países”, explica la Dra. Odile Frank, que ha analizado el documento para la Internacional de Servicios Públicos (ISP). Frank sostiene que, en el marco de esta propuesta, los gastos del gobierno aumentarían, del mismo modo que las primas de los seguros de enfermedad.
De acuerdo a la propuesta del TISA supone que los servicios de la salud son una mercancía como cualquier otra que puede ser manejada por el mercado. La comercialización de los servicios de la salud ignora los aspectos relativos a la salud pública e incrementa las desigualdades.
Mientras que las soluciones propuestas beneficiarían a los consumidores ricos y a las empresas privadas de salud, el análisis de la Profesora Jane Kelsey, experta en el comercio de servicios, sugiere que se sonsacará el dinero del sistema nacional de salud “cuyo bajo nivel de inversión se cita como uno de los argumentos a favor del tratamiento en el extranjero, y se perpetúa el problema”.
Kelsey sostiene que tales reformas pueden presionar a los gobiernos a introducir más sistemas de cuentas individuales o sistemas de recibos y dejan expuestos a los pacientes y a los gobiernos a la incertidumbre y a costes adicionales para el seguimiento de los cuidados cuando los pacientes vuelven a su país.
“Es escandaloso que se discutan propuestas para desmantelar el sistema público de salud a puerta cerrada y que la sociedad tenga que basarse en las filtraciones para averiguar lo que sus gobiernos están discutiendo en su nombre”, comenta la Secretaria General de la ISP, Rosa Pavanelli.
“La salud es un derecho humano y no se puede vender o negociar, los sistemas de salud existen para mantener a nuestras familias seguras y saludables, no para garantizar los beneficios de las grandes empresas”, dice Pavanelli.
Los beneficios potenciales para los intereses corporativos procedentes de la privatización de los servicios de salud públicos son enormes. El promedio ponderado del PIB que se destina a los servicios de atención de la salud en los 50 países que participan en las negociaciones del TISA es del 12,5% y sus gastos del PIB destinados a la salud ascienden a más de 6 billones de USD al año, lo que representa más del 90% del gasto anual mundial destinado a la salud.