Recomienda COFEPRIS que no se consuman por menores de edad ni mujeres embarazadas.
Se alista documento final de NOM para regular estos productos y proteger a la población.
Por primera vez, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) de la Secretaría de Salud alertó sobre el consumo de las autodenominadas bebidas energéticas mezcladas con alcohol las cuales representan un riesgo para la salud.
Estas bebidas se venden desde hace más de 20 años en más de 120 países, incluido México. Sin embargo, las autoridades sanitarias han detectado que algunos jóvenes las están combinando con vodka, ginebra u otro tipo de alcoholes, sin prever las consecuencias, indicó la dependencia.
En conferencia de prensa, el titular de la COFEPRIS, Miguel Ángel Toscano, afirmó que según los especialistas, consumir sin moderación este tipo de bebidas con alcohol puede provocar ansiedad, insomnio, taquicardias e incluso intoxicación por ingesta excesiva.
En los últimos años, en el mercado han proliferado las bebidas energéticas. Actualmente existen más de 50 marcas y vienen en diferentes presentaciones que van desde los 250 mililitros hasta por arriba de los 500 mililitros por envase, y ofrecen al consumidor una %u201Crevitalización%u201D o %u201Crecarga de energía%u201D, puntualizó.
Entre ellas, dijo, destacan las marcas Red Bull, Boost, Sobe Rush, Bomba, Café Olé, Monster, TAB Burn y Rockstar.
De forma general sus principales ingredientes son la cafeína y la taurina, en algunos casos se les añade pequeñas cantidades de vitaminas, inositol o glucoronolactona, aseveró.
Expuso que las bebidas energéticas pueden ayudar a mantener despiertas a algunas personas, pero no incrementan su desempeño físico, escolar o laboral. Tampoco eliminan la necesidad de dormir, sólo reducen la sensación de cansancio.
No se recomienda su consumo a menores de edad, ni mujeres embarazadas. Tampoco a personas sensibles a la cafeína ni a deportistas, además, se aconseja tomar más de 500 mililitros por día. La clave es la moderación, enfatizó Toscano Velasco, indicó.
Por su parte, la Comisionada de Evidencia y Manejo de Riesgos de COFEPRIS, Rocío Alatorre Eden Wynter, manifestó que el consumo de este tipo de bebidas se ha hecho muy popular en México, especialmente entre los jóvenes que luego las mezclan con alcohol %u201Cpara recargar energía%u201D, pero se ha comprobado que los efectos de sus componentes y el alcohol son antagónicos, es decir, el alcohol actúa como un depresor del sistema nervioso en tanto que la cafeína es estimulante.
Para proteger a la población de este riesgo a la salud, la autoridad sanitaria federal alista el documento final de la Norma Oficial Mexicana que regulará con claridad este tipo de productos.
Por primera vez, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) de la Secretaría de Salud alertó sobre el consumo de las autodenominadas bebidas energéticas mezcladas con alcohol las cuales representan un riesgo para la salud.
Estas bebidas se venden desde hace más de 20 años en más de 120 países, incluido México. Sin embargo, las autoridades sanitarias han detectado que algunos jóvenes las están combinando con vodka, ginebra u otro tipo de alcoholes, sin prever las consecuencias, indicó la dependencia.
En conferencia de prensa, el titular de la COFEPRIS, Miguel Ángel Toscano, afirmó que según los especialistas, consumir sin moderación este tipo de bebidas con alcohol puede provocar ansiedad, insomnio, taquicardias e incluso intoxicación por ingesta excesiva.
En los últimos años, en el mercado han proliferado las bebidas energéticas. Actualmente existen más de 50 marcas y vienen en diferentes presentaciones que van desde los 250 mililitros hasta por arriba de los 500 mililitros por envase, y ofrecen al consumidor una %u201Crevitalización%u201D o %u201Crecarga de energía%u201D, puntualizó.
Entre ellas, dijo, destacan las marcas Red Bull, Boost, Sobe Rush, Bomba, Café Olé, Monster, TAB Burn y Rockstar.
De forma general sus principales ingredientes son la cafeína y la taurina, en algunos casos se les añade pequeñas cantidades de vitaminas, inositol o glucoronolactona, aseveró.
Expuso que las bebidas energéticas pueden ayudar a mantener despiertas a algunas personas, pero no incrementan su desempeño físico, escolar o laboral. Tampoco eliminan la necesidad de dormir, sólo reducen la sensación de cansancio.
No se recomienda su consumo a menores de edad, ni mujeres embarazadas. Tampoco a personas sensibles a la cafeína ni a deportistas, además, se aconseja tomar más de 500 mililitros por día. La clave es la moderación, enfatizó Toscano Velasco, indicó.
Por su parte, la Comisionada de Evidencia y Manejo de Riesgos de COFEPRIS, Rocío Alatorre Eden Wynter, manifestó que el consumo de este tipo de bebidas se ha hecho muy popular en México, especialmente entre los jóvenes que luego las mezclan con alcohol %u201Cpara recargar energía%u201D, pero se ha comprobado que los efectos de sus componentes y el alcohol son antagónicos, es decir, el alcohol actúa como un depresor del sistema nervioso en tanto que la cafeína es estimulante.
Para proteger a la población de este riesgo a la salud, la autoridad sanitaria federal alista el documento final de la Norma Oficial Mexicana que regulará con claridad este tipo de productos.